Desde que inició la pandemia de COVID-19 (Enfermedad por Coronavirus 2019) causada por el SARS-CoV-2 (Síndrome respiratorio agudo y severo 2), el uso de mascarillas faciales se ha vuelto omnipresente en todo el mundo. Muchos países han aplicado políticas obligatorias de mascarillas en las áreas públicas.
El uso de mascarillas forma parte de un conjunto integral de medidas de prevención y control que pueden limitar la propagación del COVID-19. Sirven para proteger a las personas sanas y para evitar que los enfermos contagien a otras personas. Sin embargo, usar mascarilla no basta también se requiere llevar a cabo medidas de distanciamiento social, higiene de manos, entre otras.
En Aerosol Medical Systems buscamos siempre lo mejor para tu salud respiratoria y es por ello que queremos desmentir algunos mitos alrededor del uso de cubrebocas:
Varios mensajes difundidos en redes sociales han asegurado que el uso de mascarillas produce “hipoxia” o falta de oxígeno en la sangre. Esto es falso ya que los materiales que se emplean en su fabricación no limitan el paso del oxígeno.
Otro mito es que el uso de mascarilla produce hipercapnia o exceso de dióxido de carbono en la sangre arterial. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), “utilizar mascarillas médicas durante mucho tiempo puede ser incómodo, pero no provoca intoxicación por dióxido de carbono ni hipoxia”. “Una vez puesta la mascarilla médica, compruebe que está bien colocada y que le permite respirar con normalidad”, añade el organismo.
Las mascarillas higiénicas o de tela, no son capaces de filtrar el virus, sin embargo si pueden retener gotas de saliva con virus de la persona que lo utiliza, es decir, pueden ayudar a disminuir la fuente de contagios pero no son efectivos como protección para la persona que lo utiliza. Las mascarillas médicas filtrantes si son capaces de filtrar el virus, éstas si funcionan como protección para quien las utiliza.
La OMS recuerda que “usar una mascarilla de tela no basta para proporcionar un nivel de protección adecuado” y recomienda “mantener una distancia física de al menos un metro con los demás”, además de lavarse las manos con frecuencia y evitar tocarse la cara y la propia mascarilla.
Esta esta tabla te ayudará a identificar las diferencias entre los distintos tipos de mascarillas más comunes:
Ahora que sabemos cuales son solo creencias que han surgido por la pandemia, cuida tu salud, mantén tu distancia social y usa un cubrebocas capaz de ayudarte en tu día a día. Te recomendamos que sea una mascarilla KN95 por su alto grado de efectividad.